Rescato este post que escribí al empezar el blog hace nada más y nada menos que... ¡Cinco años!
Que rápido que pasa el tiempo, o eso dicen por ahí, con 20 añitos que tengo no me arrepiento de lo que he hecho hasta el día de hoy.
Esta mañana, o mediodía para la gente que normalmente duerme por la noche las horas que deben ser, no sabía que hacer así que me puse a traquinar con Ubuntu y actualizando la torre, a quitar "basura acumulada" por las carpetas y encontré algunas fotos de mi viaje a París, la nostalgia me pudo así que me puse a mirar todas las fotos de mis viajes acampadas y demás.

Es en los viajes de instituto donde acabas conociendo a la mayoría de tus compañeros de curso que no has visto en todo el año, que has ignorado que existian porque vas a lo tuyo, o que simplemente no te daba la gana de hacer caso, y resulta que caen bien y todo. Ese mismo año fui de acampada al Paisaje Lunar del Teide, bonito sitio para visitar, todo lleno de guiris por el camino como fauna autóctona de la isla, pero insisto, bonito sitio para visitar.
El siguiente año viajé a la isla de La Palma, la única vez que he ido y solo ví monte... Cinco o seis horas bajando un barranco... ¡Y me encantó!

Ya en Bachiller no tocó ningún viaje, una visita al Barranco del infierno, y alguna excursión más de la que ni me acuerdo, pero fui a Barcelona dos veces más con mi familia y espero volver algún día.

Pocos meses después y antes de saber si iba a entrar o no a la carrera que quería o saber la nota de la prueba de acceso, me puse las botas y me fui a hacer montañismo a 3718 metros, tardé poco más de dos horitas en subir hasta el refugio, donde hicimos noche, que bonito es el amanecer desde el Teide, ¡y que frío que hace!
No he viajado mucho más: Muchos días en El Hierro (más de los que me hubiese gustado) y Fuerteventura y Lobos, ¡eso sí son playas! Pero ¿Para que viajar tanto si todo lo que quiero lo tengo aquí? Me gusta ver mundo y espero seguir haciéndolo, pero mientras pueda siempre volveré a casa.